El Colegio Oficial de Veterinarios de Lugo celebró el sábado la festividad de su patrón, San Francisco de Asís, con un acto en el que participaron cerca de un centenar de personas. La jornada, que tuvo lugar en el restaurante Brasas Brancas del Hotel Mercure de Lugo, estuvo marcada por un emotivo homenaje a la trayectoria de varios colegiados, además de la tradicional cena de confraternidad.
En total, son 37 las y los veterinarios que en este 2024 cumplen 25 años formando parte de la institución lucense. A modo de homenaje y agradecimiento, el Colegio hizo entrega de un diploma y un obsequio conmemorativo a aquellos colegiados que asistieron al acto en representación de este grupo de compañeros.
En palabras del presidente, José Luis Benedito “sumar un cuarto de siglo trabajando por y para la provincia es un hecho que habla por sí mismo”. “Han demostrado ser un pilar fundamental de la institución, muchas veces trabajando en condiciones complicadas, pero siempre con un compromiso incuestionable”, subraya.
En una cita que también sirvió para analizar la situación actual de la profesión en la provincia, Benedito Castellote destacó que el Colegio “sigue creciendo y consolidándose” con una cifra de miembros que llega hasta los y las 1.153 profesionales."El nuestro no solo es el Colegio más grande de Galicia, sino también el cuarto con más integrantes de toda España", destaca el presidente,
Unos datos que reflejan “el peso de la veterinaria en nuestra provincia y nos obliga a seguir trabajando por la unidad de un colectivo más unido y fuerte que nunca, por su fortaleza y por la búsqueda del bienestar tanto animal como social”. Asimismo, reivindica “el destacado papel que desempeña nuestro Colegio, líder indiscutible a nivel nacional en la ratio de veterinarios por población”.
Cena de confraternidad
Tras el homenaje, los asistentes disfrutaron de la tradicional cena de confraternidad, que este año volvió a ofrecer precios reducidos para los colegiados, con tarifas doblemente bonificadas para aquellos que se incorporaron en el último año. El evento se convirtió en un espacio de encuentro en el que las personas asistentes pudieron compartir experiencias tanto personales como profesionales.
En este sentido, Benedito defendió la importancia de este tipo de actos “porque no solo nos permiten celebrar nuestro nexo en común, que es la veterinaria, sino que podemos aprovechar para profundizar en todos aquellos aspectos de nuestra vida fuera del trabajo que también nos unen”.
Por último, el presidente quiso agradecer a todas las empresas su colaboración con los obsequios entregados para que sean sorteados durante la cena entre todas las personas colegiadas asistentes.