La Residencia Ruta de la Plata, en Guillena, fue escenario de la sesión práctica
El Colegio de Veterinarios de Sevilla acogió por segundo año consecutivo el curso habilitante sobre Etología sobre evaluación de Perros Potencialmente Peligrosos (PPP), organizado por el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios, formación presencial exclusiva para colegiados de esta comunidad que capacita al veterinario para realizar peritaciones y valoraciones veterinarias en este campo.
La jornada formativa se desarrolló en dos partes: una teórica y otra práctica, con la asistencia de un total de 45 veterinarios procedentes de las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla.
La parte teórica se impartió en la sede colegial en horario de mañana, de la mano de Marta Amat, licenciada en Veterinaria por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y doctora en Medicina Veterinaria, Diplomada por el European College of Animal Welfare and Behavioural Medicine (ECAWBM-BM), y Tomás Camp, doctor en Veterinaria y máster en Etología Clínica, diplomado por el ECAWBM-BM y etólogo del Servicio de Etología de la Fundación Hospital Clínico Veterinario de la UAB.
Olivia Manfredi Sánchez, secretaria del Colegio sevillano, fue la encargada de presentar a los ponentes, acompañada de Francisco Sánchez Castañeda, vicesecretario, y los vocales Antonio Serrano Ordóñez y Mercedes Márquez Fernández.
Manejo, detección precoz y prevención
El programa teórico se centró en varios aspectos sobre a la importancia de la agresividad y sus consecuencias, el manejo de los datos epidemiológicos, el diagnóstico y tratamiento de los principales problemas de agresividad, los factores que influyen en la misma, mitos y prejuicios sobre la agresividad y la dominancia, estrategias de prevención y detección precoz de los problemas de agresividad, teniendo presente la legislación actual en materia de tenencia y registro de perros potencialmente peligrosos (PPP).
Por la tarde, la parte práctica tuvo lugar en la Residencia Ruta de la Plata, en Guillena. Allí, los asistentes pudieron familiarizarse con el lenguaje canino, conocer de primera mano cuáles son los test más adecuados que ayudan al profesional a identificar si un perro puede considerarse potencialmente peligroso, y aprender distintas técnicas de manejo de perros conflictivos a través del procedimiento de habituación del bozal y otras junto con otras manipulaciones.