“Victorio Lobo es un destacado veterinario y un caballero. Sobresale por su vertiente humana. Vivir es una tarea importante, pero cada uno tenemos que hacer una vida siguiendo un destino. Él eligió ayudar a los otros, por lo que tiene nuestra admiración y agradecimiento, a partir de valores éticos que forjan un futuro más solidario”.
Con estas palabras se ha expresado Luis Alberto Calvo Sáez, presidente de la Organización Colegial Veterinaria (OCV), para describir los rasgos de Victorio Lobo Cordero, que ha estado al frente del Colegio de Veterinarios de Zamora durante los últimos veinte años y que dejó esta responsabilidad el pasado mes de julio, dentro del acto celebrado hoy en su sede para conmemorar la fiesta de San Francisco de Asís, en el que ha recibido el título de “presidente de honor”.
Calvo ha señalado el mérito del hacer del Colegio de Veterinarios “no solo una referencia para la profesión, sino para la propia sociedad zamorana, siempre desde una actitud conciliadora que supera recelos, buena voluntad y corrección en el trato, sin olvidar el deber reivindicativo para defender la veterinaria y ofrecer, desde esta corporación, un lugar para transmitir lo mejor a los profesionales”.
Por su parte, Victorio Lobo se refirió a la labor de sus antecesores “de las ejecutivas y de todos los compañeros de estos años, así como del personal del Colegio, que han realizado un excelente trabajo”. También valoró el apoyo de las instituciones públicas y privadas y de los medios de comunicación. “Para mí ha sido un actividad gratificante. Solo pido a los nuevos colegiados que se impliquen en el funcionamiento y sientan que es su casa”, aseveró.
Dedicación, tesón y esfuerzo
La presidenta, Elena Laguno Crespo, que condujo el acto, manifestó su gratitud al homenajeado por su “dedicación, tesón y esfuerzo, sintiendo de alguna manera al Colegio y a los compañeros como unos hijos, como parte de su familia”. En la mesa estuvo acompañada por el presidente del Consejo de Colegios Veterinarios de Castilla y León, Luciano Diez.
La sesión comenzó con el juramento de los cargos de la nueva junta directiva y continuó con la entrega de reconocimientos a Jesús Fernández Rodríguez, por su jubilación, así como de las insignias a los nuevos colegiados, que estuvieron representados por una compañera, al coincidir con su jornada laboral.
También se otorgó el II Premio Albéitar Francisco de la Reyna, dotado con 3.000 euros gracias a la colaboración de Fundación Caja Rural, a un trabajo sobre la hepatitis E en el ganado porcino, obra de varios investigadores de la Facultad de Veterinaria de Córdoba.
A mediodía tuvo lugar un almuerzo con presencia de más de un centenar de colegiados y colegiadas en el hotel NH Palacio del Duero, además de representantes de la Junta de Castilla y León, Diputación Provincial, Subdelegación del Gobierno, Policía Nacional, Guardia Civil, otros colegios sanitarios, los presidentes de los Colegios de Veterinarios de Salamanca –Antonio Rubio-, Segovia –José Miguel Gil- y Valladolid –Rufino Álamo- y directivos de AMA.