Los veterinarios valencianos han identificado, desparasitado, vacunado contra la rabia, enviado muestras serológicas para descartar este virus y tramitado la documentación sanitaria de 1.137 animales de compañía llegados en brazos de los refugiados ucranianos. Ésta es la cifra de perros, gatos y hurones que se ha procedido a dar de alta en el Registro Informático Valenciano de Identificación Animal (RIVIA) entre el 10 de marzo de 2022 -la fecha en la que los tres colegios de veterinarios decidieron asumir los gastos derivados de todo ello- y el pasado 31 de enero.
Desde entonces y hasta el más reciente 28 de febrero, una red voluntaria compuesta por casi 140 clínicas respaldó la iniciativa colegial y atendió sin coste alguno a las difíciles circunstancias derivadas del conflicto, trabajando en el control sanitario y la entrada regulada de ese volumen de animales que acompañaba a las personas que huyeron de la guerra.
Es también éste el balance de una campaña de emergencia que comenzó a implementarse sólo dos semanas después de que Rusia iniciara su invasión y que se decidió promover para evitar mayores riesgos para la salud pública. Ahora, dada la normalización y la estabilización de la situación de los refugiados y la reducción al mínimo de la llegada de animales, se ha decidido poner fin a esta acción. Efectivamente, desde el pasado 1 de marzo, las corporaciones colegiales han dejado de asumir las facturas derivadas de estos servicios y desde esa fecha ofrecer estos servicios de manera gratuita es pues una decisión libre de cada centro o colegiado.
Quince días después, el Ministerio de Agricultura informó que desde la semana pasada España ha dejado de conceder la excepción que permitía la entrada de animales de compañía procedentes de Ucrania con el procedimiento simplificado. Por tanto, dejarán de ser aplicables los protocolos impulsados por este departamento y desarrollados en la Comunitat por parte de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica.
Sin ningún riesgo sanitario
“Ante la ausencia de ayudas públicas, la actuación altruista y coordinada de los veterinarios y el seguimiento escrupuloso de los protocolos redactados por el Gobierno central y autonómico, han garantizado que la entrada y acogida de estos animales no haya supuesto ningún riesgo sanitario. Conviene recordar que, según advertía el propio MAPA, Ucrania es un país endémico tanto del virus de la rabia como del parásito Echicoccoccus multilocularis –no detectado en España- y que el riesgo de contagio de este virus o de la enfermedad conocida como hidatidosis, que es otra zoonosis, era alto”, recuerda a este respecto la presidenta del Consejo Valenciano, Inmaculada Ibor.
La Comunidad Valenciana ha sido la región que más personas ucranianas ha acogido. Concretamente, según datos oficiales, entre el 10 de marzo de 2022 y el mes de octubre, se concedió el estatus de protección temporal a más de 38.000 ciudadanos de aquel país (por los 34.000 de Cataluña y los 22.000 de Madrid) de un total de unos 150.000 refugiados en todo el país. A falta de datos sobre el resto de regiones, atendiendo a tal cosa, es lógico pensar que también ha sido la comunidad autónoma que más animales registró y controló sanitariamente.
En pocas comunidades se organizó un sistema solidario para abordar este reto como el implementado en la nuestra por los veterinarios y sus colegios. La mayor parte de estas mascotas se registraron en Alicante (745 animales, el 65,5%); le siguió Valencia (331, el 29,1%) y Castellón (61, un 5,3%). Por especies, el 66,4% fueron perros (755); el 33,5% eran gatos (381) y sólo se identificó un hurón.