El Colegio de Veterinarios de Almería ha instalado paneles fotovoltaicos en el edificio donde se ubica su sede, dentro de la estrategia de la Organización Colegial Veterinaria (OCV) que nace bajo la denominación “VetSOStenible” y que persigue la incorporación de criterios de sostenibilidad al ejercicio veterinario, con prácticas mejores y más eficientes, alineadas con la transición ecológica.
La inversión realizada por el Colegio repercute de manera beneficiosa dos sentidos, principalmente. Por un lado, el ahorro económico que supone, ya que se reducirá el gasto en la factura de consumo energético, así como la diminución del impacto medioambiental, al evitar la emisión de toneladas de CO2 al año.
“Los veterinarios debemos liderar un cambio en el que debemos mantener una actitud proactiva definida por una serie de actitudes: constante demanda de información sobre toda esta problemática; incremento de nuestra formación y conocimiento científico; acudir a fuentes cualificadas para mostrar nuestra inquietud demandando una implicación efectiva; y, finalmente, incorporar y difundir acciones cotidianas que promuevan la sostenibilidad en todo nuestro entorno personal”, explican desde el provincia almeriense.
Combatir el calentamiento global
El uso de energías renovables es una de las medidas más efectivas, ya que su empleo no deja huella de carbono. Su uso supone notables beneficios para la salud y el medioambiente: mejora de la calidad aire, evita el empleo de combustibles, reduce la contaminación de aguas y suelos y ayuda a combatir el calentamiento global, entre otros.
Por último, cabe recordar que la Estrategia VetSOStenible nace con el objetivo de que los profesionales veterinarios trabajen desde cuatro niveles de actuación: