Los tres colegios de veterinarios de Aragón participaron en la inauguración de la exposición conmemorativa ‘175 años de los estudios de Veterinaria en Zaragoza’, de la que es comisario el catedrático de la citada Facultad Juan José Ramos Antón, y que va a permanecer abierta al público hasta el 25 de febrero. Los colegios de Zaragoza y Huesca estuvieron representados por sus presidentes Jesús García López y Fernando Carrera, respectivamente.
La exposición tiene lugar en la sala África Ibarra, del edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, donde varias infografías explican la historia y la evolución de estos estudios. Además, se pueden contemplar cuadros, fotografías, libros y material de archivo, que ilustran toda una época. En concreto, alrededor de 70 piezas de los siglos XIX y principios del XX que han servido para el estudio y aprendizaje de los alumnos que han pasado por la Escuela / Facultad de Veterinaria a lo largo de su historia.
El 19 de agosto de 1847, el Ministerio de Comercio, Instrucción Pública y Obras Públicas promulgó un real decreto, rubricado por la reina Isabel II, que establecía la creación de dos nuevas Escuelas de Veterinaria: una en Zaragoza y otra en Córdoba.
En la primavera de 1848, Anastasio Ortiz de Landázuri y Biedma recibió el encargo de poner en funcionamiento la Escuela de Veterinaria de Zaragoza que, tras superar serias dificultades para encontrar un edificio apropiado, se instaló en la calle Mayor, 59. Alrededor de 20.000 profesionales se han formado en veterinaria durante esos ciento setenta y cinco años.
Cuadros, láminas, maquetas y material clínico y de laboratorio
Entre todo el material expuesto cabe destacar dos cuadros al óleo de sendos caballos, pintados por Nicolás Ruiz de Valdivia, en 1859, que forman parte de una valiosa colección que servía para dar a conocer a los alumnos las capas de los equinos. Con la misma función docente, el profesor Pedro Martínez Baselga diseñó una serie de láminas sobre las distintas funciones orgánicas que plasmó sobre un lienzo Juan Padrós alrededor de 1920.
En tres vitrinas se exponen varias maquetas de aves, mamíferos y peces que servían para el estudio de la anatomía en las distintas especies, y que guardan en su interior los distintos órganos y componentes anatómicos. Estas piezas fueron hechas en papel maché policromado en el taller del francés Louis Auzoux, en la segunda mitad del siglo XIX, y también en el del español Francisco Blanquet, finales del siglo XIX y principios del siglo XX.
Además, se puede observar material clínico y de laboratorio que hizo su papel en la formación práctica de los futuros veterinarios y en las primeras investigaciones llevadas a cabo en la Escuela de Veterinaria. Entre estas piezas cabe resaltar un microscopio monocular en bronce dorado o una estufa de cobre de una gran calidad y valor histórico.
En estos 175 años muchas personas con su trabajo diario han contribuido a conformar lo que hoy es el Campus Miguel Servet, donde se desarrollan numerosos e importantes proyectos de investigación y se imparten los grados de Veterinaria y de Ciencia y Tecnología de los Alimentos.