Ricard Parés, Carmen López, Luis Albeto Calvo, Verónica Araunabeña y Rufino Rivero
La voluntad manifestada por la Generalitat de Cataluña para establecer la obligatoriedad de la vacuna contra la rabia ha sido valorada de manera positiva en el encuentro que han mantenido Luis Alberto Calvo Sáez, presidente de la Organización Colegial Veterinaria (OCV), con Ricard Parés i Casanova, presidente del Colegio de Veterinarios de Barcelona y del Consejo de Colegios Veterinarios de Cataluña, en el que también trataron otros asuntos de interés para la profesión.
Ambos presidentes acogieron con satisfacción que ya esté en marcha la fase administrativa de consulta, que es previa a la de información pública, “lo que nos permite prever que el decreto de obligatoriedad estará vigente en los primeros meses de 2023”, explicó Parés, quien mostró su gratitud a la OCV por su reivindicación constante para que la vacunación fuera también un imperativo legal es en esta comunidad autónoma.
En este sentido, Parés ha recordado la actitud constructiva y pedagógica de numerosos veterinarios clínicos de Cataluña, “que han insistido a los propietarios de perros para que asumieran el compromiso de vacunar contra la rabia como parte de la tenencia responsable, pero también de prevención en el ámbito de la salud pública”.
Otro aspecto abordado fue el intrusismo, tratado de modo monográfico en la reunión de la junta interterritorial de la OCV del pasado jueves. Luis Alberto Calvo reiteró que lucha “contra este tipo de comportamientos delictivos es una prioridad para nuestra Organización, pero es necesario apelar a la prudencia, lo que no significa inactividad”.
Situación del empleo
Parés, en concreto, señaló que en Cataluña también falla la calidad en el empleo veterinario, con unos 4.700 colegiados en las cuatro provincias, 3.000 de ellos en Barcelona. Además, existen ya peticiones de homologación título por parte de veterinarios procedentes de fuera de la Unión Europea, un asunto que, según Calvo, debe estudiarse con detalle.
Respecto a la Ley de Protección Animal, ambos presidentes expresaron su inquietud por cómo puede afectar el texto final a la veterinaria, en lo concerniente a la etología, valoración de comportamientos y formación en tenencia responsable, “que deben ser competencias de nuestra profesión”.
Por último, ante en notable peso específico del sector clínico de pequeños animales en toda la comunidad autónoma, con más de un millar de centros, Parés estima oportuno reforzar la colaboración la OCV en iniciativas como el comité de clínicas, que coordina María Luisa Fernández Miguel, para optimizar el trabajo conjunto en beneficio de la sanidad animal.
En encuentro también participaron el secretario general de la OCV, Rufino Rivero Hernández, y las presidentas de los Colegios de Lleida y Tarragona, Carmen López Burillo y Verónica Araunabeña Cobo. El máximo responsable del Colegio gerundense, Ramón Cedó Benet, excusó su asistencia a última hora por motivos de salud.