La Organización Colegial Veterinaria (OCV) y la Policía Nacional colaborarán para prevenir las agresiones físicas, verbales y otros delitos relacionados con la actividad profesional de los veterinarios, según han acordado el presidente de la OCV, Luis Alberto Calvo Sáez, y el comisario principal designado por la Policía Nacional como interlocutor para los sanitarios, Manuel Yanguas Menéndez, en una reunión de trabajo convocada al efecto.
Desde al año 2017 existe un protocolo de medidas policiales a adoptar frente a agresiones a profesionales de la salud, para mejorar su seguridad frente a diferentes tipos de violencia, que funciona en el marco del Sistema Nacional de Salud y comprende médicos, enfermeros, técnicos sanitarios, farmacéuticos, psicólogos, fisioterapeutas y odontólogos, al que ahora se va a incorporar los veterinarios.
Según señaló Luis Alberto Calvo, las agresiones –sobe todo verbales- a veterinarios que ejercen la clínica de animales suponen un fenómeno creciente, “que suele plasmarse en campañas de descrédito mediantes ofensas e insultos en internet y redes sociales, sobre las que ya existen condenas penales a sus autores por parte de los tribunales. Es una intimidación inadmisible que ningún veterinario debe soportar en el desempeño diario de su labor”.
El presidente de la OCV, que estuvo acompañado por el asesor jurídico, Juan José Jiménez, agradeció el ofrecimiento de la Policía Nacional y confió en establecer una línea de trabajo para abordar este tipo de casos de forma correcta, desde el punto de vista de la seguridad, de la legalidad y psicológico. Por su parte, el comisario Yanguas se interesó por conocer la incidencia de este tipo de situaciones y el apoyo prestado a los profesionales desde los colegios, entre otros aspectos.