Los veterinarios leoneses han querido despedir al profesor Miguel Cordero del Campillo, fallecido a los 95 años de edad el pasado 12 de febrero, con un recuerdo sincero tanto a su amplísima trayectoria profesional como a su calidad humana, para destacar que ha sido una de lasgrandes figuras más de la veterinaria española y así debe ser evocado.
Humanista, hombre de ciencia y de Universidad, autoridad en el campo de la parasitología, rector de la Universidad de León y presidente de honor del Colegio Oficial de Veterinarios de León, su actual sucesor al frente del mismo, Luciano Díez Díez, le define como “parasitólogo de renombre, auténtico iniciador de la especialidad, inteligente, culto, con una gran formación, erudito de la Historia Veterinaria, conversador ameno e infatigable, interesado por los problemas de sus compañeros, que siguió en el empeño de Félix Gordón Ordás por colocar a los veterinarios en el mismo plano social que cualquier otra profesión, un propósito que hoy es fácil entender que nadie duda”.
“Todos los veterinarios guardaremos sus enseñanzas como un tesoro”, reconoció Díez, quien apuntó que Cordero del Campillo siempre estuvo movido “por el amor sin límites a la profesión veterinaria desde todos los ámbitos. Durante su larga carrera profesional hubo tiempo para el ejercicio en la empresa privada (Laboratorios Syva), en la Administración (Cuerpo Nacional Veterinario, en el que prestó servicios en la Estación Pecuaria Regional) y, sobre todo, su vinculación a la Facultad de Veterinaria como profesor y catedrático de Parasitología y Enfermedades Parasitarias e Infecciosas, donde lo fue todo: decano, vicerrector y rector”, indicó.