El Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Valencia (ICOVV) celebró ayer su tradicional cena de gala en honor al patrón de los veterinarios San Francisco de Asís. Al evento, que tuvo lugar en la Masía de Xamandreu, asistieron más de 350 colegiados y contó con la presencia del director general de Agricultura, Ganadería y Pesca, Roger Llanes; el subdirector general de Seguridad Alimentaria y Laboratorios de Salud Pública, Vicent Yusà; el decano de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Cardenal Herrera-CEU, José Terrado, y el decano de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Católica, Jesús Ángel.
Durante la velada se hizo entrega de los premios Juan Morcillo relativos a trabajos académicos y trabajos científicos y Vicente Dualde en las categorías de artículo inédito, divulgación científica y fotografía de medicina clínica veterinaria. Además, se impusieron las insignias honoríficas y se presentó a los nuevos colegiados.
La presidenta del Colegio, Inmaculada Ibor, señaló durante su discurso de bienvenida la labor por visibilizar y dignificar la profesión veterinaria que se lleva a cabo desde la institución. Ibor reivindicó el destacado papel de los veterinarios en una realidad en la que la sociedad está mucho más concienciada en temas de bienestar animal, alimentación saludable y al respeto el medio ambiente. “En todos estos campos, tenemos mucho que aportar los veterinarios, y aunque siempre hemos estado ahí, como apunta el lema de la profesión que data de antiguo ‘Hygia pecoris, salus populi’ (la salud del ganado, la salud del pueblo), nos queda un largo camino por recorrer para que la Veterinaria y sus profesionales sean reconocidos por su gran labor social”, explicó.