Durante el acto, Fernández Vara, aseguró sentirse muy orgulloso de que los colegios profesionales asuman responsabilidades como la de los veterinarios cacereños que aunque con ciertos riesgos redundarán sus beneficios no solo en la profesión sino en la misma sociedad.
Además, el presidente de la Junta de Extremadura animó a todos los colegios profesionales a mantener la unión y buena relación que muestran los colegios profesionales sanitarios “que antes se tomaban el chocolate de espaldas y actualmente se lo toman juntos. Y eso hace región y país”.
Durante la inauguración también recordó la labor tan importante que realizan los veterinarios “en un país donde hay más mascotas que hijos en los hogares”.
Y concluyó afirmando que un país próspero tiene que ser decente y que nadie como los colegios profesionales para velar por la ética y la deontología.
Por su parte, el presidente del Colegio profesional, Juan Antonio Vicente Báez, recordó que la inversión total en el edificio se ha acercado al millón de euros pero que más que un gasto será una inversión ya que seguro revitalizará la zona gracias a la comunicación de dos calles, hasta ahora y desde hace mucho tiempo, cerrada al tránsito y será un edificio abierto a la ciudad y a los ciudadanos de la provincia cacereña. Vicente Báez como representante del colegio pretende dotar al edificio de actividades permanentes y puntuales que lo conviertan en un punto de referencia de la ciudad en poco tiempo.
El edificio con salida a la calle Diego María Crehuet y a la avenida Virgen de la Montaña ha sido diseñado por el arquitecto Adrián Cancho y el arquitecto técnico Pedro de Miguel Mora y se le ha dotado de las más punteras tecnologías para conseguir convertirlo en un edificio inteligente. La eficiencia energética es sin duda uno de sus mayores logros ya que su mantenimiento es mínimo.
Sus 2.000 metros están repartidos en cuatro plantas con salas de reuniones, salón de actos, zonas administrativas y aula de formación con equipos de retrasmisión en directo para quien no pueda acudir presencialmente a los cursos impartidos. También hay cabida para que asociaciones, sociedades científicas y sindicatos se puedan ubicar allí.
Por su parte, la diputada provincial del Área de Tecnologías de la Información y la Comunicación, Ana María Garrido Chamorro, resaltó que si la inauguración de un edificio de tal calado es importante lo es más en una provincia eminentemente agroganadera que depende tanto de este sector para su desarrollo económico.
El concejal de Cultura, Laureano León, anunció que el ayuntamiento cacereño impulsará a conciencia esta sede porque “lo merecen tanto la propia profesión como los cacereños”.
A continuación, el subdelegado del Gobierno, José Carlos Bote Saavedra, bromeó durante su intervención asegurando que los veterinarios de la provincia cacereña han demostrado ser muy buenos tanto en su profesión como en el sector inmobiliario.
Al acto acudieron también numerosos presidentes de las juntas directivas de otros colegios veterinarios de España y presidentes de colegios oficiales de otras profesiones de la región.
En el mismo acto, se entregó una placa al también escritor Gonzalo Giner como colegiado de honor. Este veterinario ha manifestado en más de una ocasión que para él, ésta es una elección vocacional y que se trata de una profesión viva en constante cambio y con muchas salidas profesionales, además de afirmar que este colectivo constituye “una sólida esperanza para el mantenimiento de la vida en los pueblos. Para la vida rural”. Giner siempre incluye en sus novelas su pasión por los animales y las relaciones entre éstos y las personas, como en su última obra publicada ‘Las ventanas del cielo’. Giner muy agradecido al Colegio conminó a todos los veterinarios y veterinarias a estar muy alerta con las nuevas sensibilidades de la sociedad respecto a muchos asuntos que tienen que ver con ellos y a defender siempre su profesión.