La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, anunció el pasado 18 de abril que el Ayuntamiento prepara una campaña de multas contra los dueños de perros que dejan las heces de sus mascotas en el suelo.
La ordenanza, según adelantó la alcaldesa, será “muy dura”. Pero irá acompañada de un protocolo para sustituir las multas por trabajos de limpieza. “Va a haber la posibilidad de ir de nueve de la mañana a dos de la tarde, los sábados y domingos, a limpiar o a barrer” para compensar la sanción económica, indicó Carmena.
En un desayuno informativo organizado por Europa Press, la alcaldesa informó de que el Ayuntamiento tiene un estudio de las horas en que fundamentalmente se producen esas infracciones, que están castigadas con multas que van de 751 a 1.500 euros.
La Ordenanza de Limpieza de Espacios Públicos, no obstante, prevé como alternativa al pago de la multa en la infracción tipificada como leve la posibilidad, de conformidad con el artículo 75.3 de la Ley 5/2003, de 20 de marzo, de Residuos de la Comunidad de Madrid, de que el sujeto infractor realice con carácter voluntario una prestación personal de servicios de limpieza en la vía pública en la forma y condiciones fijadas por el órgano competente para la imposición de las sanciones.
Si las sanciones fueran graves o muy graves, la ordenanza se remite al artículo 52.3 de la Ley de Capitalidad, que permite "sustituir la sanción económica por trabajos en beneficio de la comunidad, la asistencia obligatoria a cursos de formación, a sesiones individualizadas o cualquier otra medida alternativa que tenga la finalidad de sensibilizar al infractor sobre cuáles son las normas de conducta en el espacio urbano o reparar el daño moral de las víctimas".
La campaña municipal se iniciará en dos distritos, que la alcaldesa no quiso desvelar, con la presencia de policía municipal en esas horas en que se ha detectado mayor indolencia por parte de los dueños de mascotas.
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